Los estadounidenses somos conocidos por llevar una vida ajetreada y a menudo estresante. Tomarse tiempo para relajarse y descomprimir puede ayudar a reducir el estrés, que puede causar múltiples síntomas emocionales y físicos perjudiciales.
A veces, sin embargo, es más que estrés. Viene de dentro y no se va. Es esa sensación de temor que no cesa aunque no haya nada que nos amenace o nos moleste.
Es entonces cuando puede tratarse de algo más que estrés. Puede ser ansiedad, uno de los diagnósticos de salud mental más frecuentes en Estados Unidos.
Según la Instituto Nacional de Salud Mental (NIMH), aproximadamente 42 millones de estadounidenses, o alrededor del 18,1 por ciento de los adultos mayores de 18 años, padecen un trastorno de ansiedad. Alrededor del 25% de los adolescentes de 13 a 18 años padecen ansiedad.
El siguiente cuadro explica las diferencias entre estrés y ansiedad.
Origen/Causa
Estrés
Causa externa: problemas económicos, problemas conyugales, pérdida del empleo, pelea con un amigo, etc.
El estrés suele disminuir una vez que la preocupación externa ha remitido o se ha resuelto un problema.
Ansiedad
Origen interno, sensación persistente de aprensión o temor en situaciones no amenazantes que no desaparece una vez pasada la preocupación.
Los trastornos de ansiedad se desarrollan a partir de un complejo conjunto de factores de riesgo, como la genética, la química cerebral, la personalidad y los acontecimientos vitales.
Síntomas
Estrés
Emocional: Ansiedad, miedo, irritabilidad, ira, resentimiento, pérdida de confianza
Cognitivo: Dificultad para tomar decisiones, confusión, pensamientos repetitivos
Físico: Sequedad de boca, temblores, sudoración, latidos del corazón fuertes o acelerados, opresión en el pecho, dificultad para respirar, tensión muscular, dolor de cabeza, mareos.
Comportamiento: Pérdida de sueño, hábitos nerviosos como comer demasiado o muy poco, morderse las uñas y beber más café o alcohol de lo habitual.
Ansiedad
La ansiedad produce todos los síntomas observados en el estrés/estrés crónico, pero también ataques de pánicoque imitan los síntomas de un infarto de miocardio, como dolor torácico, sudoración, sensación de desmayo, náuseas, escalofríos y dificultades respiratorias.
Ocurren de repente y alcanzan su punto álgido en menos de 10 minutos (para estar seguro, nunca dudes en llamar al 911).
Los síntomas de ansiedad suelen interferir en las tareas escolares, el rendimiento laboral y las relaciones interpersonales.
A qué puede conducir
Estrés
El estrés crónico no tratado puede provocar graves problemas de salud, como ansiedad, insomnio, dolor muscular, hipertensión arterial y debilitamiento del sistema inmunitario, según la Asociación Americana de Psicología (APA).
El estrés puede contribuir al desarrollo de enfermedades graves, como las cardiopatías, la depresión y la obesidad.
Ansiedad
En casos graves, la ansiedad puede convertirse en un trastorno de ansiedad como: ansiedad generalizada, trastorno de pánico, fobias, ansiedad social, trastorno obsesivo-compulsivo y trastorno de estrés postraumático (TEPT).
Las personas con trastornos de ansiedad tienen seis veces más probabilidades de ser hospitalizadas por trastornos psiquiátricos que las que no los padecen.
Tienen el doble de riesgo de sufrir enfermedades cardiacas que las personas que no padecen estas afecciones.
Qué hacer/tratamiento
Estrés
Busque formas de controlar el estrés, como la actividad física, los ejercicios de respiración, un sueño adecuado y dedicar tiempo a conectar con los demás.
Psychology Today también recomienda hacer una lista de las situaciones estresantes y de cómo se siente uno cuando se producen, y luego desarrollar estrategias para prevenir o atenuar las situaciones estresantes.
Ansiedad
Los trastornos de ansiedad son muy tratables, pero sólo el 36,9% de quienes los padecen reciben tratamiento, según la Asociación Americana contra la Ansiedad y la Depresión (ADAA).
Varios enfoques de tratamiento estándar incluyen: terapia, medicación, tratamiento alternativo complementario y Estimulación Magnética Transcraneal.
Los mejores consejos
Estrés
Cuando vives con estrés crónico, es probable que te beneficies de una atención supervisada y deberías plantearte acudir a un profesional de la salud mental titulado.
Ansiedad
Si cree que padece un trastorno de ansiedad, es probable que se beneficie de una atención supervisada y debería plantearse acudir a un profesional de la salud mental titulado.
Fuentes:
